HIJA DE LA LUZ

CONSAGRACIÓN A SANTA FILOMENA

TESTIMONIOS

POR AGESTA

Quien más propagó la devoción a Santa Filomena en Suramerica fué el Siervo de Dios Andrés García. La Princesa era su compañera inseparable y a través de él hizo incontables milagros. El cuerpo de Andrés está incorrupto.
Una vez pasaba Andrés por la tienda de un pintor ecuatoriano y vió allí un hermoso óleo de Santa Filomena. Al preguntar el precio le dijeron que 5 onzas de oro. En ese momento no disponía del dinero para comprarlo pues tenía otras necesidades urgentes que atender.
Andrés vivía en Santiago, y con el paso del tiempo se encontró de nuevo con el pintor quien le dijo: Me voy para Valparaíso, esta es la última oportunidad que tiene para comprar el óleo. Andrés acudió a una señora amiga quien le prestó el dinero. Al pasar por la plaza de armas para encaminarse de nuevo hacia la tienda del pintor, se cruzó con un desconocido quien le dijo: RECÍBAME ESTAS 5 ONZAS DE ORO QUE LE ESTOY DEBIENDO A SANTA FILOMENA.
Este es apenas uno de los miles de favores que Santa Filomena le hizo. Muchas veces se aparecía de sorpresa en alguna casa donde había alguien enfermo. Cuando le preguntaban como sabía que había un enfermo allí, el respondía: ME MANDÓ SANTA FILOMENA.
Saludos, José Gabriel Agesta.
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